La gestación sigue avanzando y tanto en el cuerpo de la madre como en del feto continúan sucediendo una serie de cambios fascinantes que preparan a ambos para el momento del parto. Para que te sientas más preparada, conoce qué sucede en la semana 23 del embarazo, así como te invitamos a conocer importantes consejos acerca de cómo potenciar tu bienestar en beneficio propio y del desarrollo de tu hija o hijo.
¿Cómo va el desarrollo del bebé en la semana 23 de embarazo?
Sí estás en la semana 23 del embarazo, ya te encuentras entrando en el sexto mes, es decir solo faltan 16 semanas para la fecha de parto y en el futuro bebé están funcionales todos sus sistemas, madurando día a día los órganos que los conforman.
Así, por ejemplo, se establecen más conexiones neuronales; el oído está desarrollado, permitiéndole escuchar tu voz; el corazón está activo, movilizando la sangre para irrigar los tejidos a través de la red vascular; se fortalecen los músculos; se osifican los huesos; las yemas dentarias comienzan a formar las piezas dentales; el intestino es capaz de digerir, pero aún no de excretar, continuando su maduración al igual que los pulmones.
El proceso preparatorio sigue avanzando y el vello fino y la sustancia grasa que recubren la piel para protegerlo del líquido amniótico se hace más abundante y espesa. Los tiempos entre la vigilia y el sueño (siendo esencial cuidarse del insomnio en el embarazo) se acortan en menos de una hora, con fases largas de sueño. Cuando el feto está despierto realiza movimientos vigorosos y frecuentes, algunos voluntarios.
En la semana 23 del embarazo, el feto desde la cabeza a los talones mide casi 28 centímetros, tiene un peso aproximado de 500 gramos y la circunferencia craneal tiene un diámetro de 6,4 cm. Además, ya es posible conocer con certeza si tendrás una niña o un niño porque la diferenciación sexual se ha completado.
¿Es necesario realizar alguna prueba en la semana 23 de embarazo?
Durante esta semana de gestación no hay pruebas médicas específicas a realizar. Sin embargo, de sospecharse algún indicio de prematuridad, el especialista podría indicar una ecografía para conocer la longitud del cuello del útero lo que permitiría descartar o confirmar la probabilidad de parto prematuro o si hay antecedentes un cribado de diabetes gestacional.
La semana 23 de embarazo es el mejor momento para realizar una ecografía 4D, logrando visualizar perfectamente el sexo del bebé. También siendo un importante momento para cuidar de tu higiene postural.
Adaptaciones en el cuerpo de la madre en la semana 23 de embarazo
Generalmente, se espera que la madre haya aumentado entre 5 y 7 kg de peso al llegar a la semana 23 de embarazo, generando que te sientas pesada y con frecuentes dolores de espalda.
Internamente, el útero alcanza un tamaño de 23 centímetros, ubicándose directamente sobre la vejiga, ocasionado frecuentes deseos de orinar. Igualmente, los senos se preparan para la lactancia aumentando de tamaño, las fluctuaciones hormonales continúan con intensidad ocasionando el oscurecimiento o manchas en zonas de la piel.
En algunas embarazadas aparecen las várices o se presentan palpitaciones debido al incremento del trabajo vascular y del ritmo cardiaco. Mientras que por el estiramiento de la dermis abdominal suelen manifestarse las estrías.
Molestias más frecuentes al llegar la semana 23 de embarazo
Aunque no es posible generalizar que todas las mujeres sentirán las mismas molestias en esta etapa, te dejamos los síntomas más habituales entre las embarazadas al llegar al sexto mes de gestación:
Según la intensidad de estas molestias, al llegar a la semana 23 de embarazo, la mujer puede presentar dificultad para dormir o mala calidad de suelo, despertándose frecuentemente.
Afortunadamente, no todo es molestia, la buena noticia es que ya podrás percibir fácilmente los movimientos fetales y estimular a tu bebe con música o tu voz.
Consejos al llegar a la semana 23 de gestación
Mantener tu bienestar integral y por ende el de tu bebe en gestación es primordial, por eso te dejamos algunas recomendaciones fáciles de seguir cuando entras a la semana 23 de tu embarazo, logrando preparar tu cuerpo para continuar avanzando en el proceso:
Recuerda que una alimentación sana y equilibrada es imprescindible para que el bebé reciba los nutrientes que necesita en cada etapa de su desarrollo.
Conclusión
Realicen juntos la visita al ginecólogo, planifiquen asistir a cursos de preparación para el parto, trabajen en la decoración de la habitación del nuevo integrante de la familia, vayan al cine o a cenar. Lo importante es compartir tiempo de calidad y sentir el apoyo emocional que requieres en estos momentos.